Sahelices de Sabero
Villa Sancti Felicis o San Félix en honor del cual los Condes de Aquilare mandaron edificar en el siglo X el Monasterio de San Félix de Gerona.
Altitud 1.023 metros. Distancia de Sabero a un kilómetro.
Se documenta por primera vez a este pueblo en el año 1058 en una donación de parte de este monasterio que se hace a la Catedral de León, siendo obispo San Alvito; razón por la que aquí siempre tuvo casa el Obispado donde administraba justicia su merino todos los martes del año y perdiendo su propiedad con motivo de la Desamortización de Bienes Eclesiásticos del siglo XIX. En el pasado hubo dos familias que rivalizaban por su hidalguía: a saber, los Rodríguez-Vecillas con casa solariega y escudo de armas, que se conserva, y Los Bayones, cuyo máximo exponente fue Melchor Bayón, hombre de armas en Flandes que edificó a sus expensas la Capilla de los Bayones o de Nuestra Señora de las Angustias, Patrona de la Parroquia, donde está sepultado.
Las Ermitas de La Magdalena y de San Adriano, cuyas imágenes del siglo XIV se conservan en la Iglesia parroquial, enmarcadas en el magnífico retablo barroco del siglo XVII, nos recuerdan dos poblados desaparecidos.
En su territorio a principios del siglo XX se abrió el Pozo de la Sucesiva, inclinado, al que sucede inmediatamente en el año 1913 el de La Herrera, ya mencionado, y pionero en utilizar la recién estrenada energía eléctrica y en el que se concentran las explotaciones de Hulleras de Sabero a partir del año 1928, cancelado el sistema de ”contratistas”. Aquí tiene lugar a través de una “huelga de brazos caídos” una repulsa al alzamiento militar el día 19 de julio de 1936. Cerró para dar paso al Pozo de Sotillos.
Para los amantes del pasado puede resultar interesante contemplar el pequeño puente medieval, que utilizaban los frailes sobre el río Horcado o los vestigios de la picota, horca, cárcel, etc... por haber sido ”villa de horca y cuchillo”.
Los crímenes de ”Mariquita” o ”Pepón” también conmovieron un día al Valle y fueron fuentes de inspiración de coplas de ciegos.
La Cruz que corona La Peña conmemora Las Misiones del Valle celebradas en nuestra posguerra.